En cada uno de los proyectos que vamos realizando en clase utilizamos una sencilla y a la vez potente herramienta de trabajo: el porfolio. Es el lugar donde debes acudir para darte cuenta de la cantidad de cosas que vamos aprendiendo.
Ahí aparecen recogidas casi todas las evidencias de nuestro aprendizaje a lo largo del proyecto: las tareas que trabajamos, la planificación del grupo, las actividades de cada contenido, los instrumentos de evaluación con los que analizamos el trabajo, las rutinas de pensamiento que nos ayudan a asimilar todo lo que hacemos y a crear pensamiento a partir de ello...
Con el tiempo y la práctica le vamos cogiendo cariño, y va siendo como nuestro fiel e inseparable compañero en la travesía de aprendizaje que supone cada proyecto.