Como hacemos en cada uno de nuestros proyectos de trabajo, a mitad del camino hacemos una pequeña parada para pensar... hacer análisis de nuestro aprendizaje... darnos cuenta de algunos errores y de nuevas pistas para aprender mejor...
No siempre es fácil responder a las preguntas que se nos plantean, pero en el fondo sí que nos ayuda a hacernos más responsables en nuestro trabajo, pues podemos descubrir nuestros puntos flacos y también los fuertes.
Y esta es una lección que deberíamos aplicar a todos los aprendizajes que vamos haciendo en nuestra vida, los pequeños y también los mayores. Si reflexionamos sobre la forma como hacemos las cosas, seguro que en el futuro las hacemos mejor.
