Hemos hecho 3 pequeños prototipos con los Lego, de acuerdo a los proyectos interdisciplinares que hemos ido trabajando a lo largo del curso: un rover lunar, un coche de carreras y por último un dragón de Komodo.
En cada uno de ellos hemos encontrado dificultades, nuevos retos, y también pequeños pasos adelante, nuevos aprendizajes y estrategias para crear secuencias de programación. Ahora entendemos mejor eso de la planificación de los procesos, la necesidad de reflexionar antes de ejecutar, la importancia del orden en una cadena de programación...
Todavía hay mucho camino por delante, pero es un camino que recorremos con gusto. Esperamos nuevos retos este final de curso y para el próximo.